Salud, Dinero y Amor.

Salud, Dinero y Amor.

Tres cosas hay en la vida: Salud, Dinero y Amor.

Si tú lo dices... Yo me quedaría con las dos primeras y pondría a los amigos en la tercera. Se deben referir a eso. Equisdé.

A continuación no un horóscopo, sino un resumen totalmente actualizado de mi situación. Me siento a mí misma delante de la silla y me pego una repasada no sexual.

SALUD:
Hay dos subapartados.

a) Mental:
De la que prefiero no hablar mucho (pero no por nada, sino porque no acabaría). Yo estoy muy orgullosa de mi cinismo y acidez no estomacal. Y por lo demás, ¿quién en esta sociedad no necesita ir al psicólogo?. Yo tenía el dinero y me lo pagaba. Iba bien, pero ya no me quiso ver más porque me dio el alta y me dijo que estaba mejor que él y todo.
Sé de gente que no piensa lo mismo.

b) Física:
Bien, gracias. Etílica a ratos. Alérgica a muchos. Tía buena full time.

¿AUTOESTIMA? No gracias. Voy sobrada.


DINERO:
Realmente, así comenzaba mi blog de hoy: Supongo que es lógico que tenga problemas al ahorrar. No consumo demasiado y de hecho no me gasto un duro cuando salgo de fiesta, pero algo falla cuando de mi cuenta cada día falta un poquito. Que si la moto, que si el coche, que si se ha de reparar esto o lo otro...
Luego me pregunto cómo sobrevivo cuando no trabajo, y la verdad es que no lo sé, porque tampoco me falta nunca nada y parece que consuma lo mismo.. Pero no.
No sé si os pasará, pero salir a la calle con unos 50 euros me da más seguridad que salir con 50 céntimos. Pase lo que pase puedo pagarme un taxi o llamar desde una cabina. Debe ser eso.


AMOR:
Bueno, ya hemos llegado al tema "IN" (que no de interesante). El tema que acapara el 99'999999999....periódico puro % de los blogs mundiales.
Yo también hablo de él. De hecho he vuelto a nacer, y no es el típico comentario auto-creído por imposición para evitar una depresión post-trauma de pareja.
Yo hasta hace nada sufría por amor. Yo tenía mis sentimientos y los de mi pareja por encima de los míos propios. Pero por suerte vi la luz y después de casi dos décadas (como mola ser mayor y poder hablar de ellas) comprendí que todo lo que mis amigos más adultos intentaban meterme en la cabeza sin éxito alguno hasta hacía poco, era totalmente cierto. Igual de cierto es que hasta que no lo ví yo sola no lo hubiera creído.
Yo defendía al amor.
Pero ya no. Y soy más feliz. En serio.
Si hubiera leído esto hace poco hubiera pensado "Pobre desgraciado que se lo cree. Eso es porque no ha conocido el amor de verdad. Vaya amargado. Me da pena. No puede ser feliz creyendo eso."
Pues vale.

¿Hoy veis corazones que sangran, o flores?
Veáis lo que veáis, no olvidéis las gafas de sol con filtro. Nunca se sabe.



Audio: David Bowie - Changes